LA
REVOLUCIÓN RUSA DE OCTUBRE DE 1917
Lo realizado por los bolcheviques,
en octubre de 1917, demostró que la construcción del socialismo es posible
solamente a condición de que los principios del marxismo se mantengan y se
sigan firmemente.
El 25 de octubre de 1917 -según el
viejo calendario Ruso- o el 7 de noviembre -del actual calendario- los
bolcheviques lideraron y organizaron la insurrección armada, conquistaron el
poder e instauraron la dictadura del proletariado.
Este hecho fue el resultado de un proceso
de acumulación de fuerzas, en el que las masas jugaron un rol importante. En
febrero de 1917 los trabajadores y los pueblos rusos se levantaron en contra
del poder de los zares y se dio paso al surgimiento de un gobierno provisional
de carácter reaccionario encabezado por Kerenski, pero al mismo tiempo
surgieron los Soviets.
En la etapa de conquista del poder
los Soviets eran formas iniciales del poder proletario, según José Stalin éstos
“...eran palancas fundamentales de organización, que podían facilitar el
aislamiento de los mencheviques y los socialrevolucionarios”. Es por
ello que el Partido Bolchevique planteó la consigna “Todo el Poder para
los Soviets”.
La actividad del
contrarrevolucionario gobierno provisional en contra del movimiento obrero y
bolchevique se acentuaba. En julio las manifestaciones obreras fueron
ametralladas, la redacción del Pravda fue destruida y se dio la orden de
detener a Lenin, quien tuvo que ocultarse.
Los bolcheviques tenían preparado,
en el mes de marzo de 1917, un ejército político de obreros y campesinos que
fue creado en el transcurso de la lucha, a medida de los enfrentamientos de
clase y que las masas se fueron convenciendo, por su propia experiencia, de la
justeza de la política del partido del proletariado.
El Comité Central del Partido (CC),
reunido el 10 de octubre, decide la construcción de un Buró Político encargado
de dirigir la insurrección. El día 16, la sesión ampliada del CC del Partido
decide colocar a Stalin al frente del Centro del Partido encargado de dirigir
la insurrección, que sería el que condujo toda la lucha en las jornadas de
octubre.
Los bolcheviques comprendían a la
insurrección “...en el sentido más amplio de la palabra, no es
naturalmente una operación puramente militar; en el fondo, y ante todo, es un
poderoso movimiento revolucionario, un poderoso impulso de las masas
proletarias contra las clases dominantes, o por lo menos de la fracción activa
de estas masas, aún cuando numéricamente solo constituya la minoría del
proletariado. Es una lucha activa y resuelta de la mayoría activa en el momento
decisivo y en el punto decisivo. Las operaciones militares de la organización
del combate deben coincidir con el apogeo del movimiento del proletariado. Solo
en estas condiciones puede tener éxito la insurrección. La situación
revolucionaria más favorable no logra, de por sí, asegurar la victoria de la
revolución. La insurrección debe ser organizada por un partido. El poder no
viene por sí solo, hay que tomarlo.”
Comprendiendo estos elementos la
mañana del 7 de noviembre Moscú amaneció con la mayoría de los lugares
ocupados; Petrogrado estaba en manos del proletariado. Solamente el Palacio de
Invierno y algún otro punto de la ciudad estaban todavía en manos del Gobierno
Provisional durante las primeras horas de la mañana.
REGIMIENTO BOLCHEVIQUE EN LA REVOLUCION DE OCTUBRE |
En la noche los obreros se tomaron
el Palacio de invierno. Desde el crucero “Aurora” se anunció: “Comienza
una nueva era para Rusia y una nueva aurora para la humanidad.”,
mientras los cañones apuntaban al palacio de invierno. Kerenski huye disfrazado
y en un automóvil. La embajada norteamericana le dio asilo. El poder pasó a
manos de los obreros y campesinos pobres. El 9 de noviembre se organiza el
primer gobierno obrero y campesino.
Con el triunfo de la gran revolución
socialista se inauguró una nueva era en la humanidad, la época de la revolución
proletaria y el socialismo, por el que habrán de recorrer los proletarios de
todo el mundo.
La revolución rusa es el
acontecimiento más importante del siglo XX, que dio lugar, por primera vez, al
ascenso de los trabajadores, los campesinos y los soldados al poder y al
establecimiento del primer Estado proletario en la historia.
El resultado victorioso de la
revolución proletaria en Rusia marcó el principio de una nueva era y constituyó
la validación y la confirmación históricas más grandes de la teoría científica
de Marx.
La revolución de octubre señaló la
posibilidad del uso práctico del socialismo, fue probado por primera ocasión
que ésta no constituye solo una teoría científica sino un sistema social que
puede ser establecido y demostrar su superioridad sobre el capitalismo.
Con lo realizado por los
bolcheviques, en octubre de 1917, se demostró que la construcción del
socialismo es posible solamente a condición de que los principios del marxismo
se mantengan y se sigan firmemente.
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